Proyecto con papel tapiz restaurante Villa Albertina

Un rodillo y harina para aprender el arte de las “tagliatelle” según la mejor de las tradiciones. La abuela Albertina comparte pacientemente su saber con Simone Finetti, que llegaría a ser chef, pero que en 1992 en Lugo di Romagna es sólo su nieto.

Así comenzó una infancia que continuó entre la pesca con el abuelo Ledo, el cultivo de huertos naturales con el abuelo Guido y las vacaciones con su padre para descubrir la variada gastronomía marítima. Un camino que, pasando también por el programa de televisión MasterChef, llega a encontrar su cumplimiento en el restaurante casero diseñado para ser un cálido abrazo de sabores y amabilidad, donde cada plato es una historia, contada con pasión.

Un restaurante casero donde cada comensal no es un simple comensal, sino parte activa de una experiencia inolvidable.

Un hogar con un potencial inexplorado, a la espera de mostrar el arte y la magia que esconden las superficies de sus paredes. Esto es posible gracias a los papeles pintados Alone e Isla, donde naturaleza y artificio se funden en un abrazo silencioso, preservando la funcionalidad de cada espacio.

Un proceso posible gracias a un valioso diseño de interiores, capaz de transformar una propiedad en un refugio acogedor: un restaurante casero con el maestro de la cocina. Nace Villa Albertina, con el papel pintado Alone de Instabilelab en el comedor con capacidad para ocho personas. La cocina, por su parte, se reconoce con Isla, un papel pintado de fibra de vidrio, el material adecuado para ambientes húmedos y adyacente a los fogones.

Si Alone da protagonismo al lugar de convivencia, Isla, papel pintado de Fibratex, garantiza salubridad e impermeabilidad. Un diálogo constante entre los espacios de producción del chef y el entorno que lo rodea florece en una armoniosa sinfonía de estilo y funcionalidad.